Enalapril, captopril, amlodipino, hidroclorotiazida, losartan… ¿has escuchado de estos medicamentos? Quizá se los han recetado a tu abuelita o a tus padres para algún mal relacionado con la presión arterial alta.

Hay gente que debe tomarlos de por vida para controlar su enfermedad. Pero como sabemos, nuestro organismo a la larga puede verse afectado. En especial el hígado, que se encarga de procesar estos fármacos.

Remedios para tratar la hipertensión

Adoptar un estilo de vida saludable es una de las mejores formas de reducir los síntomas de esta y otras enfermedades. Sin embargo, también hay remedios naturales para tratar la hipertensión, como la olea europaea, mejor conocida como hoja de olivo.

Esta planta, de la cual se extraen las aceitunas y el aceite de olivo, tiene muchísimos beneficios. El más importante justamente, es el que ayuda a mantener una presión arterial estable. Esta propiedad se usó por primera vez desde hace varios siglos, en el antiguo Egipto.

En la actualidad, hay estudios científicos que sustentan el uso de la hoja de olivo para los síntomas de la hipertensión. Entre estos síntomas se encuentran el mareo, visión borrosa, palpitaciones, náuseas, etc. Lo que la convierte en un medicamento herbolario seguro de usar.

Hasta aquí todo suena fantástico, pero seguro te preguntarás cómo es que se debe tomar… Aunque hay quienes prefieren el té, dosis nunca resulta la exacta para eliminar los males de la hipertensión. Sin embargo, gracias a diferentes estudios, los científicos han creado fórmulas que contienen la cantidad necesaria para obtener sus beneficios.

Por ejemplo, podemos encontrar el extracto de hojas de olivo en unas gotas llamadas Olisor. Se recomienda tomar de 15 a 20 gotas disueltas en agua o jugo, tres veces al día, antes de comer.

Debido a que es un medicamento herbolario y totalmente natural, es posible combinarlo con algún otro fármaco que recete el médico, además de que es de venta libre.